El caso de Ana María una mordida cruzada bilateral con apiñamiento, traducido a lenguaje común, el paladar es más estrecho que la mandíbula y muerde invertido. Ana María quería hacerse la corrección pero pidió por su trabajo que tenía que hablar mucho utilizar un método estético y cómodo y le propuse la utilización de Invisalign. Su única duda es si iba a ser efectivo para su problema y yo le aseguré que así sería.
El tratamiento comenzó con la colocación de los alineadores arriba y abajo a la vez. En la parte superior se fue haciendo la arcada más ancha y en la parte inferior más estrecha. Al mismo tiempo hubo que limar algunos dientes para poder alinearlos y tener el espacio suficiente.
La primera fase del tratamiento duró un año y medio. Posteriormente se hicieron unas correcciones más y se tardaron 3 meses en ello.
El resultado es excelente y la paciente ha quedado muy satisfecha con el resultado. Ahora está en sus revisiones de mantenimiento para conservar al máximo los resultados obtenidos.